Una criatura de orejas puntiagudas, cejas expresivas y una carta entre manos, convertida en taza.
Esta pieza de cerámica esmaltada combina humor, emoción y detalle artesanal en un objeto funcional que no pasa desapercibido.
Un pequeño personaje que acompaña tus pausas, tus bebidas y tus pensamientos.
*Artefacto personalizado: Contactamos al artista para recrear esta pieza a tu gusto.