Una flor silvestre brota sobre esta pieza de cerámica esmaltada, pintada a mano en tonos rojizos que contrastan con su fondo marfil. Su forma redonda y cuello angosto le da carácter y una presencia delicada, como si llevara dentro un recuerdo o una historia por contar.
Hecho para contener mucho más que flores: este jarrón es un fragmento de intimidad convertido en objeto.
*Artefacto personalizado: Contactamos al artista para recrear esta pieza a tu gusto.